Adriana Rodríguez está dolida, pero se muestra entera, con la garra de una mujer sostén de familia que la adversidad le golpeó la cara, pero que no la derriba. Delincuentes entraron a su comercio y se llevaron toda la mercadería.
El comercio de Adriana está ubicado en el corazón de Pueblo Nuevo. A solo una cuadra del Centro de Salud, en la esquina de Belisario Roldán e Italia. Desde hace siete años alquila un inmueble en el que abrió un gimnasio y una tienda ropa que se llama “Tu sexto sentido”.
El jueves por la madrugada, alrededor de las 3, al menos dos delincuentes reventaron la reja de un ventiluz del baño y se llevaron todo lo que pudieron. “La reja la sacaron hasta con los pedazos de pared, y de ahí se fueron derecho al negocio y vaciaron los placares”, contó Adriana mientras mostraba todo el recorrido que hicieron los intrusos.
Apoyada en el mostrador y con la mirada fija en los estantes vacíos, la mujer describió todo lo que se llevaron: “Había camperas deportivas, calzados, perchas con ropa, todo lo que había en los estantes, las remeras, todo robaron”. En un cálculo estimativo, Adriana indicó que los ladrones se llevaron unos 30 mil pesos en mercadería.
“Para escapar rompieron una puerta trasera del gimnasio, que da al patio, sacaron una silla de madera y la pusieron contra el paredón del tapial de calle Italia y por ahí saltaron a la vereda”, comentó la víctima.
La pregunta era casi obligada, cómo iba a continuar. Sin vacilar respondió: “hay que
seguir porque hay que vivir, hay que laburar, yo soy sostén de familia, tengo una hija, hay que pagar alquiler, la luz, del negocio y de mi casa. Es como arrancar de cero, pero ahora la situación está muy complicada porque todo cuesta mucho, juntar la plata para la mercadería, para viajar, todo cuesta”.
Agradeció el accionar de la Policía, que de inmediato acudió tras conocerse el hecho, pero admitió que la zona está muy insegura porque sabe que durante el fin de semana los boliches absorben a la policía y hay lugares que quedan desprotegidos.
“Esa misma noche que pasó esto, envenenaron a siete perros, de los cuales solo dos pudieron salvarse. Han sucedido varios hechos. Un hombre intentó robar una despensa y como no pudo pateó la puerta hasta casi desarmarla, le sacaron el parabrisas a un auto estacionado. Esta complicado”, señaló.
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