Era el único de los seis acusados que continuaba preso. Tras cumplir siete meses con prisión preventiva, la Fiscalía pidió el cambio a una modalidad domiciliaria. Como no tiene vivienda en la ciudad y hasta tanto se concrete el alquiler de una casa, está alojado en un hotel.
Carlos Riera
Los casos de estafas telefónicas a ancianas ocurridas a fines de abril en Gualeguaychú fueron sin duda uno de los hechos policiales más importantes del año. La investigación de lo ocurrido llevó a la Policía y a la Fiscalía a la detención e imputación de seis personas, entre ellas una mujer, que está señalada como la persona que realizaba las llamadas simulando ser un familiar y el resto como los que se dedicaban a la logística.
En las primeras horas de mayo se originaron allanamientos en un complejo de cabañas en el ingreso a Concepción del Uruguay y se detuvieron a cinco personas, todos miembros de una misma familia de la comunidad gitana. Fueron aprehendidos por personal policial de La Histórica, porque los casos de estafas no solo se habían registrado en Gualeguaychú, sino que también habían abarcado otras ciudades entrerrianas.
Después de permanecer unos días en Concepción, fueron trasladados a Gualeguaychú donde se les imputaron los hechos y los hombres quedaron detenidos con prisión preventiva, mientras que la mujer fue ubicada en un hogar con medidas inhibitorias por ser madre y tener una hija bajo un tratamiento médico.
Mientras se realizaban las diligencias judiciales, el personal de Investigaciones de la Policía de Gualeguaychú detuvo en Córdoba a un sexto sospechoso. Este joven corrió la misma suerte que el resto y junto a los demás, quedó alojado en la Unidad Penal Nº 9 Colonia El Potrero. Pero luego de tres meses y medio, los cuatro hombres y la mujer detenidos en Concepción del Uruguay recuperaron la libertad hasta el inicio del juicio, mientras que el último aprehendido permaneció preso por considerar que existía riesgo procesal, ya que su hermano permanece prófugo de la Justicia en esta misma causa.
El martes se cumplía el plazo dispuesto para la prisión preventiva y por ello se realizó la audiencia con el juez de Garantías, Mario Figueroa, para determinar si se renovaba la medida hasta el inicio del juicio el 13 de diciembre o si adoptaba otra modalidad.
Pasó siete meses encerrado en la Granja Penal y el Ministerio Público Fiscal consideró que – como se había extendido el plazo del inicio del juicio – había cumplido un tiempo prudencial tras las rejas considerando que se trata de una persona sospechada pero no condenada. A raíz de esto es que se le solicitó al Magistrado un cambio en la modalidad y se le aplicó un arresto domiciliario.
Como el joven no tiene domicilio en Gualeguaychú, su familia estaría ultimando los detalles para el alquiler de una casa y hasta tanto esto no se efectivice, el imputado fue alojado en un hotel céntrico de la ciudad bajo costas personales y con custodia policial.
Por lo pronto, desde el martes 13 hasta el viernes 16 de diciembre se desarrollará en los Tribunales de Gualeguaychú el juicio contra los seis acusados de los delitos de estafas y asociación ilícita. Luego, en Concepción del Uruguay deberán afrontar otro juicio por los hechos ocurridos en esa jurisdicción.
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